Hay muchos museos aeronáuticos en el mundo. Los mayores son de titularidad estatal, pero también hay muchos museos que son privados.
Mantener uno de estos museos no es una tarea fácil ni barata. La restauración y el mantenimiento de las aeronaves consumen muchos recursos económicos y técnicos y también muchas horas de duro trabajo, a menudo hecho por voluntarios que colaboran con estas instituciones. En ocasiones, todo ese trabajo se puede venir abajo debido a las inclemencias del tiempo, incluso en lugares desérticos, que en teoría son los más adecuados para la conservación de un avión por su escasa humedad ambiental. Es el caso del Lauridsen Aviation Museum, situado junto al Aeropuerto de Buckeye, una ciudad de 50.000 habitantes en Arizona, Estados Unidos.
El 8 de agosto de 2022, una gran tormeta de arena azotó este museo, causando serios daños en él. El mayor afectado fue un hidroavión Canadian Vickers PBV-1 Canso de la Segunda Guerra Mundial, el N413PB (cn CV-343, número de serie 11073). El avión, construido en 1944, era una variante canadiense del famoso Consolidated PBY-5 Catalina.
Sirvió en la Real Fuerza Aérea Canadiense (RCAF) en Terranova durante la guerra. Sufrió un accidente en 1955. Después de ser reparado, el avión fue vendido a un operador civil en 1957, sirviendo con distintas empresas en Canadá hasta 1996, cuando fue vendido a Buffalo Airways Ltd, que lo utilizó como un avión de extinción de incendios hasta 2007. Ese mismo año acabó en el Lauridsen Aviation Museum.
El avión estaba en proceso de restauración cuando la tormenta de arena lo destrozó. Unos días después el sitio web neerlandés Scramble.nl publicó estas palabras del restaurador del avión, Matt Gunsch: "se necesitaría incluso mucho para lograr una exhibición estática, los largueros de las alas están rotos en varios lugares, ambas góndolas han sido arrancadas del ala, la aleta vertical está aplastada y el fuselaje tiene la parte trasera rota, lo único que sostiene el fuselaje son los cables de control".
Cuatro meses después de la tormenta de arena, Peter Wolf visitó el museo y comentó: "Hoy estuve en el aeropuerto Buckeye, el lugar parece abandonado y el PBY está al revés. Es bastante desalentador verlo en este estado". Hace tres semanas, Greg Cardone estuvo allí y confundió el lugar con un cementerio de aviones, como lo menciona en este vídeo:
Podéis ver aquí algunas capturas del vídeo. Esta imagen muestra el estado actual del PBV-1A Canso. Las alas han sido desmontadas y se han retirado los motores.
Una de las alas del PBV-1A Canso. Tiene un bloque de cemento encima para que no se la lleve otra tormenta de arena.
Un Grumman HU-16 Albatross que perteneció a la Cuardia Costera de EEUU. El número de serie militar del avión era el 131904 (cn G-333), hoy tiene matrícula civil N216HU. Parece el menos afectado por la tormenta de arena, pero tiene bloques de cemento amarrados a su tren de aterrizaje para inmovilizarlo.
Un Douglas DC-3C (N243DC, cn 9247). Fue inicialmente un C-47A, el 42-23385, siendo convertido más tarde en un DC-3C civil, dedicando a labores de transporte de carga. Llevó a este museo en 2004. También tiene el tren de aterrizaje amarrado a bloques de cemento para inmovilizarlo.
Un Grumman C-1A Trader (el 136752), utilizado por la Marina de Estados Unidos para transportar personal y carga a los portaaviones. Hoy tiene matrícula civil N71456. Llegó al museo en julio de 2005.
Además de aviones, el museo también tiene vehículos. Aquí vemos unos cuantos antiguos camiones de bomberos. En el vídeo también aparecen vehículos militares.
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Comentarios:
wladimir
interesante…
11:58 | 9/09/23
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