En el Reino Unido hay cementerios muy bellos y algunos tienen curiosas leyendas asociadas a la muerte quienes descansan en sus tumbas.
Uno de esos cementerios es el Viejo Cementerio de Overleigh, en Chester, una localidad inglesa que está en el límite con la parte nordeste de Gales. Este cementerio, de aspecto típicamente victoriano, fue consagrado el 12 de noviembre de 1850 por John Graham, el Obispo de Chester de la Iglesia de Inglaterra. Su diseñador fue el arquitecto inglés Thomas Mainwaring Penson (1818–1864). Inicialmente fue un cementerio privado pero pasó a manos del ayuntamiento en 1930. Este cementerio está lleno de bonitas tumbas con cruces celtas y diversas esculturas, y sus lápidas parecen haber sido colocadas de forma desordenada, creando un paisaje curioso.
Una de las tumbas más famosas de Overleigh es la de una niña llamada Mabel Frances Ireland Blackburne, nacida el 7 de abril de 1866 en Chester y fallecida el 13 de noviembre de 1869. La pequeña murió de tos ferina, pero empezó a circular una historia que atribuyó su muerte a un atragantamiento con un chicle, tal vez una leyenda urbana creada para advertir a los niños contra las chucherías. Durante mucho tiempo, los niños de Chester cantaban una pequeña canción que hablaba sobre esta historia, por lo que la pequeña Mabel empezó a ser conocida como la "Chewing Gum Girl" (Niña del Chicle).
Este jueves, Dead Good Walks publicó un vídeo recorriendo este cementerio y visitando la tumba de esta niña (el vídeo está en inglés, puedes activar los subtítulos automáticos en español en la barra inferior del reproductor):
Podéis ver aquí algunas capturas de este vídeo. Éste es el aspecto de la parte más antigua del cementerio, inaugurada en 1850 y con un aspecto puramente victoriano.
En el cementerio hay monumentos funerarios que cuentan historias muy variadas, y en algunos no hay nadie enterrado. Es el caso de este bonito monumento dedicado al Capitán Griffith Jones Evans, desaparecido en el mar el 20 de diciembre de 1869.
La pequeña tumba de Mabel Frances Ireland Blackburne. Está adornada con una escultura de aspecto realista de una niña durmiendo. A pesar de estar algo escondida, es una de las tumbas más visitadas de este cementerio.
Todavía hoy, 155 años después de su muerte, se siguen depositando flores y peluches junto a la tumba de Mabel. También existe la costumbre local de depositar chicles en una pequeña cesta junto a su tumba.
No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico: |
Comentarios:
Otromas
Fascinante historia. Muchas gracias.
17:18 | 21/04/24
wladimir
interesante…
22:08 | 21/04/24
Opina sobre esta entrada: