Fue el primer buque acorazado con casco de hierro que tuvo la Royal Navy

HMS Warrior: una visita a una fragata blindada de 1860 hoy convertida en un excelente museo

Hay museos flotantes que son un auténtico regalo para la vista. Uno de los más antiguos se puede visitar en el puerto de Portsmouth, en el sur de Inglaterra.

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La HMS Warrior fue la primera fragata blindada que tuvo la Royal Navy británica. Puesta en grada en 1859 y botada en 1860, entró en servicio al año siguiente, tenía un desplazamiento de 9.284 toneladas y una eslora de 128 metros, y estaba impulsada a vela y por un motor de vapor. Estaba muy bien armada, con 26 cañones de 206 mm de avancarga, 10 cañones de 178 mm de retrocarga y otros 4 cañones de 121 mm. Era un buque grande y poderoso.

Sin embargo, la HMS Warrior quedó pronto obsoleta debido a los avances en construcción de buques de guerra en la segunda mitad del siglo XIX. En 1875 pasó a la reserva naval y en 1883 fue retirada. Descartada su modernización por ser demasiado cara, a comienzos del siglo XX acabó convirtiéndose en un barco depósito para una flotilla de destructores.

En 1904 fue rebautizada como Vernon III, convirtiéndose en una escuela de torpedos, una función que siguió haciendo hasta 1923. La Royal Navy decidió venderla en 1925, pero nadie quiso comprarla ni siquiera para desguazarla.

Así pues, la Warrior siguió en Portsmouth convertida en un embarcadero, hasta que en 1929 fue llevada a Pembroke Dock, en Gales. Se convirtió en un buque depósito y, ya en la Segunda Guerra Mundial, fue utilizada como base para buques dragaminas.

Tras muchos años de abandono, y desprovista de su arboladura, en 1979 empezó un largo y difícil proceso de restauración que requirió un estudio detallado de cómo era originalmente el barco, ya que, por ejemplo, su antiguo mascarón de proa había sido destruido en la década de 1960.

En 1987 el barco fue devuelto a Portsmouth, donde fue recibido con una gran celebración. Desde entonces funciona como museo, formando parte de la National Historic Fleet, una flota de más de 200 buques históricos británicos que son conservados hoy en día como parte de un proyecto nacional de preservación de buques que tuvieron una importancia histórica para el Reino Unido.

Como podéis ver en estas fotos, publicadas en la web y en la página de Facebook oficial del buque, la HMS Warrior tiene todo lujo de detalles y recrea la fragata original como si estuviese lista para volver al servicio activo mañana mismo. También sirve de escenario para bodas, una función en la que se ha hecho muy popular.

Si te has quedado con ganas de ver más de este formidable barco, no te pierdas este interesante vídeo publicado hace unos días por History Hit que muestra el interior del buque:

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Comentarios:

  1. FaramirGL

    Qué chula. Me encantaría que hubiera más barcos museo en España, bien cuidados.

  2. wladimir

    interesante….

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