Un curioso búnker de la Segunda Guerra Mundial en la pared de un acantilado

Durante la Segunda Guerra Mundial, tras la caída de Francia, Gran Bretaña se preparó para hacer frente a un posible desembarco alemán en sus costas.

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Como parte de esa operación de defensa, se construyeron fortificaciones costeras en las zonas donde los alemanes podrían llevar a cabo ese desembarco. Algunas de esas fortificaciones aprovecharon construcciones más antiguas, como un curioso búnker situado en la pared de un acantilado en Dover, la localidad británica más próxima a las costas francesas. Sus blancos acantilados son el origen del nombre más antiguo de Gran Bretaña: Albión.

Hace unos meses, VacantHaven publicó un interesante vídeo sobre este búnker, accediendo a su interior y recorriendo sus galerías:

Los autores del vídeo señalan que se cree que parte del complejo de túneles se remonta a mediados del siglo XIX, pero la estructura actual es de principios de la Segunda Guerra Mundial y se construyó para proteger esa playa, que era un probable punto de invasión.

VacantHaven señala que "las secciones del túnel no están revestidas, particularmente el primer tramo desde la entrada original, mientras que otras secciones tienen un revestimiento de pared de ladrillo o pilares de ladrillo espaciados irregularmente y techos abovedados de acero corrugado arriba. Más cerca del acantilado, la erosión se ha cobrado su precio y la mayor parte de la pared frontal original de hormigón armado de 0,6 m de espesor del puesto de ametralladora y el revestimiento de ladrillo se han derrumbado".

La descripción del vídeo señala que este búnker estuvo inicialmente a cargo del 70º Batallón The Buffs del Royal East Kent Regiment, una unidad del Ejército Británico. En noviembre de 1940, el 5º Batallón de Royal Marines Comandos se hizo cargo de él. Su cuartel general local estaba en el pueblo cercano en Curfew House, en Kingsdown Road, en una casa que es actualmente la sede local de la Royal British Legion, una asociación de veteranos de las Fuerzas Armadas británicas. Como se ve, el búnker tiene una salida posterior que lleva a lo alto del acantilado, con unas escaleras en muy mal estado.