Skrolsvik: una antigua batería alemana de la SGM en Noruega que aún conserva su artillería

@Explorandoinfo EN Vie 2·12·2022 · 22:50 1

Durante la Segunda Guerra Mundial, la Alemania nazi logró conquistar una serie de países que sumaban casi 2.700 kilómetros de costas atlánticas.

Pyramiden: un pueblo fantasma soviético en una isla noruega del Océano Glacial Ártico
Explorando dos buques de guerra de los años 90 y ya semiabandonados en Noruega

Para defender ese extenso litoral de posibles ataques de los Aliados, el Tercer Reich construyó miles de fortificaciones desde el sur de Francia, junto a la frontera con España, hasta el norte de Noruega. Para equipar esas fortificaciones se diseñaron más de 600 tipos distintos de búnkers. Esa larguísima línea defensiva recibió el nombre de "Atlantikwall" (Muro del Atlántico). La costa noruega era la más larga y complicada de defender, debido a sus intrincados fiordos, y en ella se encontraba un lugar vital para la maquinaria de guerra alemana: Narvik, un puerto noruego que daba acceso a las minas de hierro de Suecia, un país neutral pero que suministró grandes cantidades de ese metal a Alemania durante la Segunda Guerra Mundial.

Para obtener el control de Narvik, entre abril y junio de 1940 fuerzas aliadas formadas por noruegos, británicos, franceses y polacos se enfrentaron a los alemanes en tres cruentas batallas por tierra y por mar, que finalmente culminaron en una victoria alemana. Después de aquellos combates, los alemanes iniciaron la construcción de baterías de artillería para proteger esa zona. Una de las baterías se instaló en Skrolsvik, en el acceso norte a Narvik. La batería, manejada por la Marina de Guerra alemana, disponía de cuatro cañones navales de 150 mm con un alcance de 22 km, además de defensas antiaéreas y proyectores.

Al concluir la Segunda Guerra Mundial, la batería de Skrolsvik pasó a manos del Ejército Noruego, que la usó -al igual que otras antiguas baterías de la Segunda Guerra Mundial- para proteger las costas de ese país nórdico durante la Guerra Fría. La batería fue abandonada en 1989, coincidiendo con la caída del comunismo en la Europa oriental. Hace poco, el canal alemán Simply Adventure publicó un interesante vídeo explorando lo que queda de esta batería (el vídeo está en alemán pero dispone de subtítulos en español, puedes activarlos en la barra inferior del reproductor):

Podéis ver a continuación algunas capturas del vídeo. Aquí vemos un cañón antiaéreo sueco Bofors de 40 mm que aún se conserva en esta batería:

Uno de los cuatro cañones navales de 150 mm que se situaron en esta batería, aún en su búnker.

Una de las joyas de esta batería es este proyector, aún guardado en su búnker de resguardo. Se utilizaba para iluminar los blancos para los disparos de la artillería.

Una galería subterránea que servía de polvorín para almacenar las municiones utilizadas por la batería.

Como curiosidad, en las inmediaciones de la batería hay varada una lancha de desembarco, con el numeral VLG-595. Es muy posterior a la Segunda Guerra Mundial. Fue construida en 1992.