Un sitio para recorrer las ruinas del alma humana y recordar a sus víctimas

Un monumento triste para días tristes en los que están reapareciendo fantasmas del pasado

Cuando empecé a publicar Explorando.info lo hice por entretenimiento. Pero ¿de qué hablar aquí cuando tienes noticias como ésta?

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¿Cómo evadirte y desconectar cuando hay noticias que parece haber exhalado un aire frío y siniestro sobre tu alma? Me considero un romántico de la vieja escuela y por eso siempre me han gustado los lugares abandonados y las ruinas. Pero hoy no es el día para visitar ruinas materiales. Hoy es un día para recorrer las ruinas del alma humana.

Reconozco que nunca me he llevado bien con el arte contemporáneo, pero hay algunos ejemplos de él que sí me gustan. Uno de ellos es éste que os traigo hoy. Este monumento está en la ciudad de Berlín, la capital de Alemania, y parece un buen sitio para pasear en un día triste como el de hoy (foto: Michael Fousert).

Su diseñador fue el arquitecto Peter Eisenman, un estadounidense de origen judío que también también diseñó la Ciudad de la Cultura, en Santiago de Compostela (foto: Craig Cooper).

Este monumento recuerda claramente a un cementerio. Está formado por 2.711 losas de hormigón, de distintos tamaños (foto: Ryen).

Este triste y desconsolador monumento fue construido para recordar a los judíos asesinados en el Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial. Su forma es una paradoja, pues muchas de las víctimas fueron incineradas o sepultadas en fosas comunes, no en cementerios (foto: Andrea Nardi).

Eisenman nunca ha explicado el significado del monumento, si es que lo tiene. Supongo es que es como intentar buscarle sentido al propio Holocausto. ¿Para qué tanto horror? ¿Cómo explicar algo así? (foto: Stefaan Van Parys).

Uno de los peores riesgos que corre cualquier civilización es olvidar el pasado, porque nos expone a que se repitan los errores y los horrores que ocurrieron entonces. Por eso lugares así son muy necesarios, y más cuando parece que los fantasmas del pasado están reapareciendo, movidos por el mismo antisemitismo irracional que llevó a los nazis a cometer aquel genocidio (foto: Augustine Wong).

Nuestra sociedad se creía inmune a esos fantasmas, actuaba como si el Holocausto fuese el fruto de una anormalidad que ya nunca más se podría repetir porque nosotros somos mejores. Y aquí, en esta sociedad civilizada nuestra, aún tenemos a miserables justificando el asesinando indiscriminado de judíos, incluyendo la decapitación de bebés y de niños pequeños a manos de los terroristas de Hamás (foto: Ricardo Gomez Angel).

Hoy es un día para dejar que el alma camine por lugares así, preguntándose cómo hemos vuelto a esto, qué hemos hecho cada uno de nosotros para evitar que la historia se repita, y si no podríamos haber hecho algo más (foto: Tobias Rademacher).

En fin, lamento una entrada tan atípica, pero hoy no tengo el cuerpo para otra cosa. Os dejo con mi alma deambulando como un espectro entre esas enormes losas, aunque estén muy lejos del lugar en el que vivo. En este vídeo de City by Foot las podéis ver mejor:

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Comentarios:

  1. El Peregrino Gris

    No conviene olvidar que todo el sufrimiento de los inocentes no pasará en balde. No digo solo que el Señor juzgará a los malvados cuando llegue su Día. Si no que los mismos malvados ya deben estar viviendo el infierno aquí en la tierra. Para cometer tales crímenes, el alma de uno debe estar prácticamente destruida y, por ende, esta gente jamás será feliz, aun cuando se salgan con la suya. Siempre estarán insatisfechos.

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